La gestión del talento humano, por ser este considerado uno de los activos más importantes de las organizaciones, ha tomado un protagonismo importante en los últimos años, especialmente con la entrada del talento joven, por muchos denominados los Millennials, al mercado laboral. Esta nueva generación nos podría brindar grandes aportes, complementando a nuestra fuerza laboral actual a lograr objetivos a mediano y largo plazo, siempre y cuando logremos desarrollar su mayor potencial.
Este grupo de jóvenes, capacitados para afrontar grandes retos en el mundo laboral, buscan participar y aportar valor a la organización; trayendo nuevas ideas a la mesa, siendo creativos en la forma de hacer las cosas, y sacando un poco al ejecutivo tradicional de las costumbres y maneras usuales de realizar las tareas del día a día. Están acostumbrados a visualizar la ejecución de labores desde otra perspectiva, ya que vienen con una mentalidad fresca, lo cual puede generar una gestión de cambios en procesos que nunca habían sido cuestionados, en beneficio de la empresa.
Están acostumbrados a visualizar la ejecución de labores desde otra perspectiva.
Aparte de esta nueva perspectiva, un segundo aporte de estos jóvenes profesionales es que esta nueva generación entra en los inicios de la era digital, trayendo consigo conocimientos tecnológicos de vanguardia, contribuyendo de diferentes formas al desarrollo de la organización. Las generaciones anteriores se están comenzando a apoyar en estos jóvenes, buscando incorporar nuevas tecnologías en su labores cotidianas. También están colaborando con la automatización de procesos e implementación de nuevos sistemas, modernizando las organizaciones y apoyando a la reducción de gastos de las mismas.
También están colaborando con la automatización de procesos e implementación de nuevos sistemas.
En adición a una perspectiva distinta y a la introducción de nuevas tecnologías, los millennials serán quienes harán crecer y le darán continuidad a nuestros negocios a largo plazo; serán nuestros sucesores. Para ello, debemos asegurar que los mismos tengan oportunidades de aprender, crecer y aportar nuevos conocimientos, integrándose a la cultura empresarial existente. Podrán, en el tiempo, incorporar nuevas políticas y estilos de trabajo, dándole mayor importancia a los beneficios y valores que las nuevas generaciones estarán buscando, siempre manteniéndose dentro de las estructuras organizacionales. Cada generación, a su manera, aporta distintas ideas dentro del mercadeo labora y siempre hay algo nuevo que podemos aprender. La innovación, después de todo, nace del cambio.
Cada generación, a su manera, aporta distintas ideas dentro del mercadeo labora y siempre hay algo nuevo que podemos aprender.
En vista del profundo impacto que pueden tener los nuevos integrantes al mercado laboral en nuestras organizaciones, debemos lograr desarrollar su mayor potencial, en conjunto con nuestros equipos actuales, a fin de lograr que nuestras empresas consigan alcanzar los objetivos establecidos de la manera más rentable posible. Siempre debemos tener presente, que nuestros jóvenes serán los líderes del mañana.
Angelique Humbert
Gerente General de Talentum